MARCHA CRISTIANA CARLOS COLOMA
Compuesta por Azael Tormo Muñoz, la marcha cristiana Carlos Coloma ha sido la pieza obligada del XXXV Certamen de Música Festera de Elda 2022. Con ella la Junta Central de Moros y Cristianos y la AMCE Santa Cecilia se suman a las actividades que el Ayuntamiento de Elda, la Fundación Paurides y muchas otras entidades eldenses han organizado en torno al Año Coloma 2022.
En el siguiente enlace se puede disfrutar de una grabación en directo de la marcha, interpretada por la Unión Musical Benicadell de Castelló de Rugat, ganadora del certamen, en el que también participaron la Banda Sociedad Unión Lírica Pinosense y la Unión Musical de Polop de La Marina (pulse sobre la imagen).
Notas sobre la marcha cristiana Carlos Coloma, de Azael Tormo Muñoz
La música de esta composición transita por distintas estéticas que van desde la politonalidad a la música tonal y coral o el uso de distintos modos y escalas. En cuanto a su instrumentación, el uso de algunos instrumentos de percusión como las cadenas, el yunque o la cortina, así como la intervención de la trompeta piccolo están indicados para su interpretación en concierto, siendo su utilización opcional en los desfiles.
Sipnosis
La introducción, a modo de fanfarria, nos presenta a Carlos Coloma como un hombre de armas, con una carrera militar brillante labrada en los campos de Flandes. Así, es fácil imaginar el fragor de una batalla y el cruel destino de los prisioneros. El primero de los fortes es un tema solemne que hace referencia a su noble ascendencia como miembro de la casa de Elda. Este forte da paso al siguiente tema que, a modo de plegaria, nos recuerda su vocación por la tradición clásica. La reexposición de la fanfarria inicial y una progresión donde se suceden los distintos motivos de la marcha nos llevan al grandioso forte final.
Reseña de Carlos Coloma
Carlos Coloma (1566-1637) es uno de los personajes históricos más relevantes y, a la vez, más desconocidos de Elda. Su vida y su trayectoria, su talento, su consideración y su reputación, lo convirtieron en una figura de trascendencia nacional e internacional en la España y en la Europa de su tiempo.
Decimosegundo hijo del poeta y primer conde de Elda, Juan Coloma, Carlos tuvo que labrarse una larga y brillante carrera militar, diplomática y literaria, con una vida digna de un relato novelesco. Carlos Coloma ejerció al servicio de tres reyes en la España del Siglo de Oro (Felipe II, Felipe III y Felipe IV), en multitud de lugares y destinos: Flandes, Francia, Portugal, Sicilia, Alemania o Italia. Pero se sintió originario de Elda, donde estaban sus raíces y donde su familia construyó su casa solariega, y así se reconoce en la documentación histórica conservada.
Carlos Coloma tuvo una intensa biografía y un extenso currículum militar y político. Espada y pluma de los Tercios, alcanzó el grado de maestre de campo, con un notable prestigio en las guerras de Flandes e Italia. Fue gobernador de importantes plazas fuertes y enclaves estratégicos para la monarquía, virrey de Mallorca, diplomático (embajador en Londres en dos ocasiones), y miembro del Consejo de Estado. Caballero del hábito de Santiago, fue comendador de Montiel y Ossa. Además, concilió esta intensa actividad milit
ar y política con su faceta de hombre de letras, como historiador y traductor de los Anales de Tácito (1629) y autor de varias obras muy reconocidas en su época, como De las guerras de los Estados Baxos (1622), de las que fue participante destacado y cronista.
Varios expertos sostienen, aunque persisten dudas, que pudo aparecer retratado en La rendición de Breda o Las lanzas, la celebérrima obra que el genial Velázquez culmina en 1634.
Con el paso de los años, su figura quedó relegada y prácticamente restringida al interés de estudiosos y académicos. Esta marcha cristiana es un granito de arena más en la labor de recuperación de la memoria de este personaje y de su familia. Y con ellos, de la historia de Elda.